— Y después de comerme la cabeza una mañana entera… en Zapier se podía hacer en 2 clics
— ¡Wow! ¿Y eso no lo vas a contar en la newsletter?
— enga, sujet me the cubat.
¡OMG! ¿Se va a atrever Santy a hablar de Zapier? ¿Se acerca el fin del mundo? ¿Ha cerrado Make?
Mira, automatista. Este finde ha sido la WordCamp de Madrid y he hablado laaaargo y tendido sobre este tema en varias conversaciones. Gracias a Dios que esto es una newsletter y no un podcast, porque aún no he recuperado la voz del todo 😁😁😁.
Y en una de esas charlas con un suscriptor surgió el diálogo de arriba.
Así que aquí me tienes, contándote la última batallita en la que me metí hace unas semanas y donde Zapier salió muy muy bien parado frente a Make: hablemos de documentos de Google Docs
«Muchas veces las formaciones se llenan de partes vacías o de relleno en la que sientes que estás perdiendo tiempo o te gustaría darle al botón x2. Aquí, al contrario, atención plena para no perderte nada, un 10″.
Esto decía María, una de las primeras automatistas que pasó por el Desafío. ¡Y eso que ella venía de Zapier!
Lo de arriba es el resultado de un proceso bastante simple con Google Docs que se complicó en exceso (y no se terminó del todo, realmente). La idea es sencilla: cada vez que se rellena un formulario en Airtable (acta de reunión), se genera un mensaje y se añade al principio de un documento de Google Docs. Después, se avisa por Slack mencionando a los interesados.
El proceso, que parecía muy sencillo y trivial, se complicó en exceso en el último punto: que fuera sobre un documento ya existente. ¿Por qué? Por el formato del texto y cómo funciona Google Docs en Make.
Con la API de Google Docs, añadir un texto con formato a un documento que ya tienes es un dolor de muelas.
No, no lo puedes añadir en formato HTML.
No, tampoco te vale markdown.
Ni puedes ir añadiendo cómodamente cada frase.
Lo único que te queda es hacer chopocientos cálculos para indicarle en qué posición (número de caracteres desde el inicio) empieza tu texto, en cuál termina y qué formato quieres darle.
Y, con todo eso, construir un json exageradamente largo (lo que sale a la derecha de la imagen) y bastante difícil de probar.
El asunto es que, comentándolo con otra automatista, me dijo: «Ostia… lo que en zapier sería una acción, aquí se complica mogollón!!!»
Y, efectivamente, fui a comprobarlo y así era: en Zapier, esa misma acción sí que se puede hacer con un texto en HTML. Y entiendo que son ellos de manera interna los que lo convierten al formato requerido por Google.
Así que puntazo para Zapier aquí.
Entonces, ¿Quién gana? ¿Es mejor Zapier que Make? No te líes. Aquí quien tiene que ganar, eres tú. Tus sistemas y tus procesos. La herramienta viene después. Yo, ahora mismo, trabajo con clientes en Zapier, en Make, en IFTTT y en Pabbly. Incluso estoy tanteando un par que tienen n8n.
Porque una vez tengo claro qué quiero conseguir… el resto es aprender cómo funciona la máquina. Como cuando aprendes a conducir y luego puedes usar otros coches, aunque sean diferentes al tuyo!
En este caso, decidimos quedarnos en Make: a nivel de costes sería impensable migrar todo lo que tenemos a Zapier. Y tampoco le vemos sentido a tener dos herramientas distintas solo por esta parte tan pequeña.
De momento, el proceso funciona a las mil maravillas así. Tal vez en unas semanas diseñe algún algoritmo para mejorarlo y darle más formato.
Pero el tiempo liberado ya supera con creces el «problema» de no tener el texto en negrita.
Te veo la semana que viene, automatista!
Santy.
PD: en la esquina contraria tengo un Zapierostio de mucho cuidado, con un cliente que está pagando más de 700$ al mes en Zapier… y al que vamos a migrar a Make por menos de la mitad.
PD2: «Un cambio de mentalidad a la hora de afrontar cada acción que quiero automatizar». Eso también lo han dicho del Desafío. Algo que está muy muy por encima de la herramienta y que es lo que realmente soluciona el caso que te contaba hoy.
PD3: Y sí, correcto. La caja de herramientas que te enseño a utilizar en el Desafío… es Make 😂😂. Porque aunque sepas conducir cualquier coche siempre hay alguno con el que te sientes más cómodo.